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En PEDIGREE® sabemos que consentir a tu perrito es lo que más te gusta, ¿verdad? Y cuando se trata de alimentarlos y consentirlos, siempre surgen nuevas preguntas: por ejemplo, qué frutas pueden comer los perros y cuáles no.
¡Aunque no lo creas no eres el único que se pregunta eso! Es súper común, y la respuesta es que sí, ¡muchas frutas son seguras y hasta benéficas para ellos!
Pero ojo, no todas son aptas, y dárselas con moderación es una clave importante para su salud. Así que prepárate para descubrir un mundo de sabores y nutrientes que puedes compartir con tu peludo, siempre con responsabilidad y amor.
Sabemos que la salud de tu perrito es una prioridad y por eso quieres darle lo mejor, y eso incluye una dieta equilibrada y variada.
Las frutas pueden aportar beneficios para su digestión, sistema inmunológico y bienestar general, pero antes de que te lances al súper a comprar frutas para tu perro, es importante que sepas qué frutas pueden comer los perros y cuáles deben evitarse a toda costa.
Las frutas, con sus vitaminas, minerales y fibra, pueden ser un excelente complemento a su alimentación habitual; es decir puedes dárselas como un snack delicioso y alimentarlos con croquetas y sobres especialmente formulados para ellos, como los que tenemos en PEDIGREE®.
Aquí te presentamos una lista de frutas seguras y deliciosas que puedes ofrecer a tu peludo.
Si te preguntas si los perros pueden comer plátano, la respuesta es sí. Los plátanos son una excelente fuente de potasio, vitamina B6 y vitamina C.
Son ideales para subir de energía rápidamente y pueden ser un buen premio de entrenamiento o un snack para después de un ejercicio intenso, como largas caminatas o si sales a trotar o correr con él.
Sin embargo, son bastante altos en azúcar, así que debes dárselos con mucha moderación. Unas pocas rodajas pequeñas son suficientes para un perro mediano.
Puedes darle plátano fresco o congelárselo en los días de mucho calor.
¡Buenas noticias para los amantes de esta fruta! Los perros pueden comer mango, y les encanta su sabor dulce y exótico. El mango es rico en vitaminas A, B6, C y E, además de fibra.
Es un antioxidante natural que puede ayudar a fortalecer el sistema inmunológico de tu consentido. Eso sí, asegúrate de pelarlo completamente y retirar el hueso central, ya que contiene cianuro y puede ser un peligro de asfixia.
Córtalo en trozos pequeños y ofrécelo como un premio ocasional.
Cuando hace mucho calor ¿no se te antoja un pedazo de sandía? Es una fruta muy fresca y con un alto porcentaje de agua. Si te preguntas si los perros pueden comer sandía, la respuesta es un sí rotundo y refrescante.
La sandía es casi un 92% agua, lo que la convierte en una opción fantástica para mantener a tu perro hidratado cuando hace calor o después de sacarlo a pasear y a correr.
Además, es rica en vitaminas A, B6 y C, y potasio. ¡Pero cuidado! Tienes que retirar TODAS las semillas y la cáscara antes de dársela, ya que pueden causar problemas digestivos. Ofrécele solo la pulpa en trozos pequeños.
Si te preguntas si los perros pueden comer fresas, la respuesta es sí, y son una opción maravillosa.
Estas pequeñas frutas rojas están repletas de antioxidantes, vitamina C y fibra. Ayudan a fortalecer el sistema inmunológico y pueden incluso contribuir a blanquear los dientes de tu perro.
Para dárselas es necesario que las laves bien, les retires el rabito y las desinfectes. Córtalas por la mitad o en cuartos, dependiendo del tamaño de tu perro. Son un premio delicioso y saludable que puedes darle con confianza.
Las manzanas son una excelente fuente de vitaminas A y C, y fibra. La fibra es buena para la digestión de tu perro, pero es muy importante que te asegures de quitar el corazón y todas las semillas, ya que contienen pequeñas cantidades de cianuro.
La cáscara es segura y contiene fibra adicional, pero si tu perro tiene un estómago sensible, puedes quitársela con un pelador. Unas rodajas de manzana son un premio que muchos perros adoran.
Estos pequeños frutos azules son un verdadero súper alimento para los perros. Están llenos de antioxidantes, que combaten el daño celular y pueden ayudar a prevenir enfermedades.
También son una buena fuente de fibra y vitaminas C y K. Son pequeños y fáciles de comer, lo que los convierte en un premio perfecto. Puedes dárselos frescos o congelados, ¡pero ojo! No le des arándanos deshidratados, ya que contienen mucha azúcar.
Las peras son otra fruta segura y deliciosa para los perros. Son ricas en vitaminas C y K, fibra y antioxidantes. Al igual que con las manzanas, es necesario que retires el corazón y las semillas antes de dárselas a tu perro.
Córtalas en trozos pequeños y dáselas como un dulce ocasional.
Al igual que la sandía, el melón es una excelente fuente de agua, vitaminas A y C, y potasio. Es muy refrescante y puede ser un buen snack para el verano.
Asegúrate de quitar la cáscara y las semillas antes de dárselo a tu perro.
La piña fresca (nunca enlatada, ya que contiene mucha azúcar) es segura para los perros en pequeñas cantidades.
Es rica en vitamina C, tiamina, riboflavina, niacina y vitamina B6. Sin embargo, también es bastante ácida y puede causar malestar estomacal si se consume en grandes cantidades.
Para dársela a tu perrito retira la cáscara y el corazón fibroso y pártela en pequeños trozos.
Así como hay frutas seguras, hay otras que son tóxicas para los perros y deben evitarse a toda costa. Es crucial saber qué frutas pueden comer los perros y cuáles no, para proteger su salud.
Aquí te dejamos una lista de las frutas que jamás debes darle a tu consentido:
Además, su acidez puede irritar el sistema digestivo. Es mejor evitarlos.
Una vez que ya sabes cuáles frutas pueden comer los perros, es hora de introducirlas en su alimentación de forma segura, para ello sigue nuestros consejos:
Lo primero y más importante que debes tomar en cuenta es que siempre hay que consultar al veterinario antes de introducir cualquier alimento nuevo en la dieta de tu perro, especialmente si tiene alguna condición de salud preexistente o alergias. Cada perro es diferente, y lo que le sienta bien a uno, podría no ser lo ideal para otro.
Una vez que tengas el visto bueno de tu veterinario, recuerda que las frutas deben ser un complemento, no la base de su alimentación.
Piensa en ellas como premios saludables especiales. La regla de oro es la moderación. Demasiada fruta, incluso de las seguras, puede causar malestar estomacal, diarrea o incluso desequilibrios nutricionales debido a su contenido de azúcar natural.
Además, siempre retira las semillas, las cáscaras y los tallos. Muchos de ellos contienen cianuro o pueden causar obstrucciones intestinales.
Lava bien la fruta para eliminar pesticidas y córtala en trozos pequeños para evitar que tu consentido se atragante, sobre todo si es de los que devora la comida o es muy pequeño.
Ahora ya sabes qué frutas pueden comer los perros y que hay muchas opciones deliciosas y nutritivas que puedes compartir con tu mejor amigo.
Como tutor responsable, nuestra misión es asegurar que nuestros peludos estén sanos y felices. Ofrecerles frutas de forma segura y moderada es una forma de enriquecer su alimentación y fortalecer el vínculo que compartimos.
Así que la próxima vez que estés disfrutando de una jugosa sandía o unas fresas, ¡recuerda que tu perro también puede disfrutar de un trocito, siempre con precaución y mucho amor!
Si deseas saber más de este y otros temas sobre el cuidado de tu perro, entra al Blog de PEDIGREE® en donde encontrarás mucha más información.
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