Que verduras pueden comer los perros

¿Qué verduras pueden comer los perros?

En esta ocasión en el Blog de PEDIGREE® vamos a platicar sobre un tema que causa muchas dudas y está en el interés de todos los papás perrunos. Muchas veces, ya hemos tocado temas relacionados con qué nutrientes necesitan y cómo escoger las mejores croquetas para su edad o raza. Por ello, hoy nos toca hablar sobre qué verduras pueden comer los perros.

Verduras que puedo y no puedo darle a mi perro

Si bien ya hemos platicado sobre las frutas que pueden comer, hoy es turno de las verduras, ese secreto que hace que tu mejor amigo vea tanto su plato como la hora de la comida con otros ojos. 

Nosotros sabemos que tu perro no es solo una mascota, ¡es parte de tu familia! Y como tal, merece una alimentación que lo mantenga sano, fuerte y lleno de energía para todas esas aventuras que comparten. 

Por eso entendemos tu preocupación por darle lo mejor, y que a veces esto te lleva a tener dudas como: ¿Hay verduras seguras para mi perro? ¿Pueden comer de todo lo que yo como? ¿Qué verduras le hacen daño y debo evitar darle?

Pero, ¡tranquilo!, para eso estamos aquí en el Blog de PEDIGREE®, para guiar el viaje culinario de tu amigo peludo y que, en conjunto con nosotros, puedas darle una alimentación completa, balanceada, que además sea deliciosa, atractiva para él y que a ti te deje tranquilo.

Así que prepárate para descubrir el fascinante mundo de las verduras que pueden enriquecer la dieta de tu compañero de cuatro patas. 

¿Por qué son importantes las verduras?

Las verduras son un tesoro de vitaminas, minerales y fibra. Pueden ser un complemento fantástico para su alimento habitual, para que junto con los nutrientes que ya encuentras en los alimentos de PEDIGREE®, tu perro esté más sano y feliz que nunca. Pero, como siempre, hay que saber cuáles sí, cuáles no y cómo ofrecerlas de forma segura. ¡Vamos a desentrañar este misterio juntos!

Para algunas personas, puede que la idea de darle verduras a sus perros suene incluso un poco extraña, ya que estamos acostumbrados a pensar en ellos como carnívoros. Y sí, la carne es un ingrediente primordial para su dieta por todo lo que aporta a su sistema. 

Pero, piensa en las verduras como una aportación extra de nutrientes que, en combinación con su dieta usual, puede marcar la diferencia en el desarrollo de un perro sano. Desde su pelaje, hasta la digestión o el sistema inmune, diversas partes de tu amigo perruno pueden verse beneficiadas con el poder de la verdura. 

Solo debes tener cuidado, no se trata de convertir a tu perro en vegetariano. Se trata de complementar su nutrición adecuada con un plus saludable. Y, aunque siempre te recomendamos que todas las decisiones de salud y nutrición de tu perro las tomes junto con tu veterinario de confianza; aquí te van unas cuantas ideas para que te sea más fácil tomar una decisión informada. 

Entonces, ¿qué verduras pueden comer los perros?

Ahora sí, ¡llegó el momento de la verdad! Vamos a explorar una por una de las opciones que te proponemos para que no te quede duda de que todas son deliciosas, seguras y tienen mucho que aportar a tu perrito.

Zanahorias: el snack crujiente 

Son un verdadero tesoro para tu peludo pues son bajas en calorías y ricas en vitamina A, que es excelente para la vista y el sistema inmunológico. Además, su textura crujiente les ayuda a limpiar los dientes y a fortalecer las encías. Puedes dárselas crudas, en trozos muy pequeños, o cocidas al vapor. 

Brócoli: un superalimento en pequeñas dosis

Esta es una fuente increíble de vitaminas C y K, fibra y antioxidantes que traen beneficios para la vista de tu perrito, así como sus huesos y dientes. Puedes dárselo cocido al vapor y en trozos muy pequeños pero siempre de manera ocasional, ya que también contiene mucha fibra y otros elementos que, en grandes cantidades, pueden causar malestar estomacal 

Calabaza: aliada digestiva 

Es una excelente fuente de fibra, lo que la convierte en una aliada perfecta para la digestión. Si tu perro tiene problemas de estreñimiento o diarrea leve, un poco de calabaza cocida y sin especias puede hacer maravillas. También es rica en vitaminas A y C. Solo asegúrate de nunca darle la piel ni las semillas de la calabaza. 

Espinacas: un toque verde lleno de hierro

Además de aportarle energía a tu perro, las espinacas mejoran sus defensas y la vista gracias a que son ricas en hierro, vitaminas K y A, y antioxidantes. Sin embargo, contienen oxalatos, que en grandes cantidades pueden interferir con la absorción de calcio. Por eso, modera su consumo y lávalas muy bien antes de dárselas. 

Apio: adiós al mal aliento 

Por sus antioxidantes y alto contenido de fibra, potasio y vitaminas como B, C y K, esta verdura es de las favoritas para los peludos. Pero también a los humanos nos encanta dárselas porque les ayuda mucho a mejorar su aliento.

Así como hay verduras que son buenas para tu perro, hay algunas que pueden resultar no ser seguras. Por ejemplo, la cebolla, el ajo, el cebollín o los puerros, contienen compuestos que pueden dañar sus glóbulos rojos y provocar anemia. Otras, como los champiñones, las papas o los tomates verdes, pueden resultar tóxicas para su sistema digestivo y nervioso. Por eso, antes de compartir tus vegetales con tu mascota, es importante informarte bien: lo que para ti es un alimento nutritivo, para tu perro podría convertirse en un riesgo innecesario.

La regla de oro: Trozos pequeños y con moderación

Ahora que ya sabes qué verduras pueden comer los perros, es hora de introducirlas en su alimento de forma segura. Aquí te dejamos algunos consejos:

Empieza poco a poco

Ofrece una pequeña cantidad de una sola verdura a la vez. Observa a tu perro durante las siguientes 24 horas para detectar cualquier signo de malestar digestivo (vómitos, diarrea, gases). Si todo va bien, puedes probar con otra verdura.

Lávalas y córtalas adecuadamente

Siempre lava bien la verdura, retira tallos, hojas duras o cualquier parte que no sea comestible. Córtalas en trozos pequeños, especialmente si tu perro es de los que devora la comida o es de raza pequeña.

Ofrece con moderación

Recuerda que las verduras son un complemento, no una comida principal. Unas pocas piezas son suficientes para aportar beneficios sin excederse.

Varía los sabores

Una vez que sepas que tu perro tolera bien una verdura, puedes probar con otras de la lista segura. ¡La variedad es la clave para una dieta equilibrada y divertida! Además, enriquecer su alimento es una maravillosa manera de fortalecer el vínculo entre ustedes.

No olvides consultar siempre a tu veterinario antes de introducir cualquier verdura  en la dieta de tu amigo perruno, especialmente si tiene alguna condición de salud o alergias. Cada perrito es un mundo, y lo que le sienta bien a uno, podría no ser lo ideal para otro.

Una vez que tengas el visto bueno de tu veterinario, recuerda la regla de oro: trozos pequeños y con moderación. Además, siempre lava bien las verduras para eliminar pesticidas. ¡Tu peludo te lo agradecerá!